Pain of Salvation

He caminado en este camino desde ya hace muchos años…



…he gastado todas mis lágrimas



…he dejado muchas cruces atrás.



Quizás esta vez es suficiente. Llévame a casa!


martes, 6 de noviembre de 2007

Valores...


Hace unos cuantos años atrás, cuando los lazos con el hijo de un amigo se estrecharon tanto que lo adopté como “mi hermano menor”, en una dedicatoria de un libro, le escribí una serie de máximas, que si bien las enseñaba de forma musical, eran aplicables a todas las circunstancias de la vida…claro que en aquel escrito de primera página estaba cargado con cierto amor paternal…en fin. Esto viene a colación, pues en varios de los mails que me llegan (debido a este blog), me preguntan sobre los valores por los que me rijo, y que dogmas utilizo para encontrar un bienestar espiritual. Muchos sabrán que he andado por varios caminos y que la filosofía y la teología no son ciencias que desconozca, sino que, a pesar de que no las profeso, me fascinan. Es verdad que hay un aura oriental en todo lo que me rodea, pero también (nuevamente, aquellos que me conocen de antaño) llevo en mi sangre algo de sabiduría druida…por lo que no es raro que de tanto en tanto hable de épicas batallas y tiempos remotos cuando los conocimientos provenían de lo que hoy llaman “mundos fantásticos”. De cualquier forma, hoy quiero transmitirle esos valores (los cuales trato de inculcarlos a quienes amo, como en el caso de mi amigo-hermano adoptivo) de los que defiendo a “capa y espada”, ja ja!!:

“Se fiel a tu alma; ama a los tuyos; vela hasta por tus enemigos; enriquece tu espíritu; enséñate a ti mismo aprendiendo del tiempo; no te conformes con lo común, lo normal y lo ordinario; rechaza la mediocridad; busca el virtuosismo en la paradójica complejidad de lo sencillo; alimenta tu Gaia. Que tus edades sean un constante escenario de aventuras y un fructífero almacenamiento de experiencias. Piensa, siente, medita y ama.”

…como verán, quizás no es algo que no hallan oído, y que en palabras sean simples, pero estas palabras que se transmitieron de boca en boca durante miles de años, hicieron que muchas personas encontraran la grandeza de espíritu. Es probable que te encuentres con que el mundo no se rige de la misma manera, y que mas de una vez el deseo de desenvainar la espada y aplicar la justicia se apoderen de ustedes cuando lleven a cabo estos valores, pero recuerden las últimas palabras: “piensen, sientan, mediten y amen.”

Ai obi et!! (lo que en un remoto lenguaje seria: “Nos vemos!!”)

Juiahnn…el último Ivaris.