Pain of Salvation

He caminado en este camino desde ya hace muchos años…



…he gastado todas mis lágrimas



…he dejado muchas cruces atrás.



Quizás esta vez es suficiente. Llévame a casa!


lunes, 1 de enero de 2007

Otoño en verano.




Hace calor!!! Si, lo se…y recién comienza el verano y ya tengo añoranza de que esta calurosa (e invasora) estación termine para que comience la nostalgia del otoño… Como no tengo el poder de hacerlo (no aun, ja-ja) trato de recrearlo con pequeñas cosas. Una de ellas es esperar el atardecer mientras con mate en mano (esto puede ser suplantado por un cigarrillo, una pipa, un café, o una cerveza) escucho algunos discos de Nick Drake. Este compositor y cantante (sin olvidar lo excelente guitarrista que era sobre todo con la técnica del finger picking), de origen británico, cuya carrera comenzó a fine de los 60’ y concluyo con una dudosa muerte de sobredosis de antidepresivos en los 70’, era un amante del otoño y las cosas profundas que hallaba en la vida simple. Admirado como “letrista inteligente” y estudiado como guitarrista, fue un juglar y un poeta del que no es fácil cansarse de su música. No es mi motivo contarles su vida aquí, ya que encuentran infinidad de información en la web (sobre todo en La Wikipedia y en un sitio llamado, creo, La Luna Rosa,), sino de cómo su estilo y emulación me libera del fastidio de estas fechas.
Yo mismo me convierto en una especie de Atumn Child, y sonoramente es una experiencia que quiero transmitirles. Como hacía Nick Drake, busquen un buen lugar para esperar la frescura de la tarde, como debajo de un árbol, en una galería exterior de una casa o un su balcón, o simplemente sobre el césped. Lleven un libro el cual les guste y mientras lean solo una porción de éste disfruten de un mate o un cigarrillo. Tomen su guitarra previamente afinada de la siguiente manera (Nick Drake utilizaba muchas afinaciones alternativas): La 6ta hay que bajarla a Re, la 5ta queda en La, al igual que la 4ta queda en Re y la 3ra en Sol. La 2da y la 1era se baja un tono, quedando La y Re. De esta manera la afinación quedaría de la siguiente manera de la 6ta a la 1era: D-A-D-G-A-D. Ahora con la guitarra sobre sus regazos toquen la siguiente progresión de acordes...

…disfruten de su sonido orgánico y otoñal. Pueden rasguearlo lentamente, o mejor aun, arpegiarlo libremente. Oirán notas “simpáticas” que vibran acompañando la melodía. Dejensen llevar por la misma. Paren de tanto en tanto y observen el cielo y denlen una buena cebada al mate o una pitada a su cigarrillo. Vuelvan a hundirse en la melodía más y más a medida que el cielo se oscurezca y la tarde se ponga más fresca. Disfruten de este pequeño otoño hasta que llegue por completo. Hagan esto como habito de disfrute. Es como meditar. Toquen sus propias melodías otoñales. Sean poetas. Canten lo que leyeron o tarareen sobre su nostálgico sonido. Toquen, toquen y toquen, transpórtense hacia donde quieran con el poder de la música. Yo les di este ejemplo de cómo ser un “niño de otoño” en pleno verano, pero es eso, un ejemplo… Ustedes con su música pueden recrear y ser lo que deseen. Seguramente así lo hacía el joven Drake…

Juiahnn.